El pasado 7 de julio las chicas Com2Be dimos un gran paso. ¡Un paso de los de verdad! Después de varios meses de colaboración con la Transpirenaica Social Solidaria (TSS), entidad que trabaja en proyectos de inclusión social, nos animamos a vivir desde dentro esta gran experiencia. Todo sea dicho que, debido al COVID-19 solo podía acudir una, Marina, nuestra compañera gestora de medios y RRSS , fue la valiente que se unió al grupo en el último stage, en número 5. Y hoy os contamos un poco más sobre toda la experiencia vivida y las vivencias extraídas de este proyecto.
La TSS organiza cada verano la Travesía TSS, la marcha por la inclusión social y el desarrollo sostenible que consiste en cruzar el Pirineo andando desde el Cabo de Higuer al Cap de Creus. Esta entidad impulsa la inclusión social y el talento de los jóvenes migrantes y/o en situación de vulnerabilidad o riesgo de exclusión a través del recorrido de diferentes etapas de montaña. Este año, por segunda vez consecutiva y debido al COVID-19, la entidad ha optado por organizar la TSS Stage Natura. Estancias de 5 días y 4 noches en distintos refugios de montaña. Así pues, 5 grupos de unas 25 personas se han repartido a lo largo de este último mes por distintos puntos de Navarra, el País Vasco, Aragón y Catalunya para llevar a cabo salidas circulares por el monte.
En concreto nuestra compañera se sumó en el Stage 5 que tuvo lugar del 7 al 11 de julio, en el refugio Cap de Rec, en el que Marina tuvo el privilegio de conocer rincones mágicos y encantadores y vivir una experiencia inolvidable, creando sinergias especiales con los participantes en la misma.
Justo en este tramo participaban jóvenes en situación de vulnerabilidad de cuatro entidades: Fundació de l’Esperança- Fundació “La Caixa” Casa del Recés de Barcelona, Vitamina, Centre Sant Jaume y ISOM junto con dos educadoras y dos educadores y seis personas del equipo de la TSS. Marina asistió para conectar con el proyecto y vivir de primera mano lo que supone la “Transpi” y cómo es el día a día en lo más alto de la montaña.
“Durante el día se hacían distintas rutas circulares que nos permitían descubrir paraísos y a la vez conocernos, compartir experiencias y aprender de los demás. A lo largo del día trabajamos la atención plena para centrarnos en valores fundamentales para la TSS como la igualdad, la solidaridad, el cuidado de la naturaleza y la gratitud. Valores que se reflexionaron en cada uno de los foros sociales que hicimos a lo largo de los días y que llegaron a crear momentos mágicos. Con conversaciones que giraban alrededor de estos valores, muchos de los jóvenes decidieron abrir sus corazones y explicar experiencias propias o reflexiones muy profundas. En definitiva, brutal, así definiría la experiencia”, en palabras de Marina.
Un gran aprendizaje personal y profesional que nos ha transmitido a todo el equipo: “Compartir estos días con jóvenes y no tan jóvenes procedentes de realidades tan distintas ha sido un regalo. Entender y replantear las relaciones humanas y ratificar que la igualdad es la base de todo y que además, este concepto cobra todo el sentido estando aislado de la realidad de las grandes ciudades.”
Son cinco meses colaborando con esta entidad en materia de comunicación y redes sociales, una experiencia que nos ha aportado tanto y de la que aprendemos a diario, gracias a su buen hacer y trasfondo social. Sin duda, la educación y el respeto por los demás es algo fundamental aplicable a todos los aspectos de la vida, y a veces, sin duda, se nos olvida.
En Com2Be siempre hemos tenido claro que somos una empresa con gran trasfondo social y nos esforzamos por dejar nuestra huella, nuestra marca en todo aquello que hacemos y que puede generar, en mayor o menor medida, el cambio. Acercarse a la realidad de estos jóvenes que viven situaciones de exclusión, que llevan a sus espaldas un pasado duro y que, muchas veces, son ignorados o enfrentados por otras personas de nuestro entorno debe ser un deber para todos. Se suele decir que “cualquier persona que te motive a ser mejor es alguien que vale la pena tener cerca”. Eso son para nosotras todos y cada uno de las personas que forman parte de la Transpirenaica.
Por ello continuaremos formando parte de esta aventura, porque cuando el cohete se enamora, es difícil echarlo. Y el próximo año, sin dudarlo, ¡iremos con el equipo al completo!